Los migrantes tienen que enviar más dólares a sus familiares para igualar las cantidades que les mandaban con regularidad.
Por Araceli Martínez Ortega
Los Ángeles, 15 de julio (LA Opinión).– El peso mexicano se fortalece cada vez más frente al dólar, pero cómo afecta a los mexicanos en el exterior que envían dinero a sus familias en México. Los migrantes se quejan de que sus dólares rinden menos, pero no dejan de mandar sus remesas y lo hacen en números récord.
A algunos migrantes entrevistados por La Opinión nos les agrada mucho el crecimiento de la moneda mexicana, porque se ven obligados a enviar más dinero para igualar la suma que con regularidad proporcionan a sus seres queridos.
Norberta Polanco, residente en Compton, California, dice que cada 15 días manda a su mamá alrededor de 500 dólares, pero desde que el peso ha escalado frente al dólar, ha tenido que buscar cómo incrementar el envío para compensar la suma que usualmente le entrega a su madre.
“Tengo que apechugar y enviar más dinero en remesas. Lo raro es que mi mamá me dice que a pesar de la baja del peso frente al dólar, allá en México sigue todo muy caro”.
Platica que debido al súperpeso mexicano, paró la construcción de su casita que estaba a punto de comenzar a edificar en su pueblo en Guerrero, México.
“Mejor cerqué el terreno en donde quiero levantar mi casa, en espera de que el peso vuelva a subir”.
El peso mexicano se cotizaba este viernes 14 de julio a 16.89 por dólar, un nivel que no se había visto desde diciembre de 2015, según el Diario Oficial de la Federación.
De acuerdo a la plataforma financiera Bloomberg, la apreciación de la moneda mexicana en lo que va del año es de 13.77 por ciento.
De acuerdo a expertos, la alta cotización del peso tiene que ver con el aumento de la inversión extranjera en México, de las exportaciones y de las remesas; y el diferencial de las tasas de interés entre México y Estados Unidos.
Juan José Gutiérrez, director de la Coalición Derechos Plenos de los Inmigrantes, dijo que el precio del dólar en México afecta a favor del vecino país, porque hace que los migrantes manden más dólares en remesas.
“Ha bajado casi a 16: eso beneficia a México, pero perjudica al que envía porque aquí en Estados Unidos, casi todo sigue muy caro. La inflación está desatada. Como resultado, el inmigrante se tiene que sacrificar en su gasto diario para mandar las cantidades que su familia en México está acostumbrada a recibir; y para completarla, hay que mandar más dólares”.
Como consecuencia, Gutiérrez señaló que la pérdida de fuerza del dólar frente al peso mexicano, está implicando un sacrificio para los migrantes, ya que tienen que restringirse aún más en sus gastos y apretarse el cinturón.
Jesús Ibarra, residente de Los Ángeles, dijo que él manda dinero a Nayarit cada tres o cuatro días no solo a su familia sino a diferentes causas que apoyan en su pueblo.
“Organizamos eventos y mandamos ese dinero a México, pero para nosotros los migrantes, es una pena que esté tan bajo el peso. Antes rendía más, y a veces espero a que mejore un poco la cotización antes de mandar una remesa. Siento que me están robando”.
Ibarra concluyó diciendo que los migrantes que envían sus remesas a México son víctimas de la recuperación del peso.
Maribel Solache, una migrante mexicana que radica en San Diego, envía cada mes el pago para el departamento que adquirió en México, y también para pagar la colegiatura para una maestría online que estudia con una Universidad de México.
“Obviamente ahorita que el peso está bajo, tengo que mandar más dólares para que se cubra ese pago. El tipo de cambio beneficia a México, pero a quienes mandamos dinero de aquí, nos afecta”.
Sin embargo, Solache dijo que no le pesa enviar más dólares.
“Si me causa un gasto extra, claro. Tengo que mandar como 300 dólares más para pagar mi departamento, pero no me quejo porque eso significa que le va bien a México. Y eso a mí, me importa mucho”.
A pesar de la depreciación del peso mexicano frente al dólar, los mexicanos no dejan de enviar dinero a sus seres queridos, y lo hacen en cifras récord sin precedente alguno.
El Banco de México (Banxico) reveló que en mayo de 2023, los ingresos por remesas del exterior alcanzaron un nivel de 5 mil 693 millones, un aumento anual de 10.7 por ciento.
De hecho, durante los tres primeros meses del año, México superó en alrededor de 1,5000 los 12 mil 522 que se enviaron en ese mismo periodo de tiempo en el 2022.
El año pasado, México recibió 57 mil 497 millones en remesas de Estados Unidos a México, lo que marcó un nuevo récord, con un crecimiento de 13.4 por ciento con respecto a 2021.